La situación de sequía extrema que ha vivido Kenia, la peor que ha sufrido el país durante los últimos 40 años, está aumentando enormemente los conflictos entre los humanos y los leones. Según explica el Servicio de Vida Salvaje Kenia (KWS), solo la última semana una decena de estos grandes felinos han sido abatidos en el sur del país, un «número inusualmente alto de leones muertos de golpe», según afirmó un portavoz de la institución.
Un momento muy tenso
Tal y como explicaron desde el mismo KWS, el final de las épocas de sequía son momentos muy tensos en la relación entre los humanos y los leones, porque las presas salvajes son muy escasas y, a la vez, los ganaderos están especialmente sensibles a cualquier pérdida causada por este grandes felinos porque la sequía ya los ha hecho perder fuerces reses.
La muerte de uno de los leones más viejos de África
Solo sábado, seis leones fueron abatidos por ganaderos después de causar la muerte de once cabras y un perro. A principios de semana, además, también se supo que uno de los leones más viejos de toda África, Loonkiito, había muerto en la edad de 19 años después de entrar en un corral completamente muerto de hambre. Los ganaderos, al verlo, lo mataron con sus lanzas.
Las autoridades miran de reducir la conflictividad
Lo KWS celebró una reunión este sábado, con la participación tanto de ganaderos como de autoridades locales, por habla sobre el problema que supone este aumento de la tensión entre leones y humanos. Entre otros cosas, se habló de como encontrar maneras de reducir el riesgo de este tipo de problemas, como por ejemplo el despliegue de sistemas de alerta para que las personas sepan que hay depredadores salvajes a la zona.
Al fin y al cabo, muchas comunidades locales han vivido en una coexistencia armoniosa, si bien no siempre pacífica, con los leones, y hay que encontrar maneras que este ‘respeto’ mutuo, que permite el desarrollo de la vida de ambas especies, se recupere. Esto es especialmente
