Un nuevo estudio, publicado en la revista ‘PLOS Biology’, concluye que los ataques de animales carnívoros a humanos han aumentado continuamente desde 1950. La responsabilidad de este hecho, pero, no es en ningún caso de los animales sino de las personas, que han ido ocupando sus hábitats con poblaciones cada vez más numerosas. El cambio climático, además, también podría tener un papel importante en el incremento de estos conflictos.
Una cuestión de probabilidad
Los datos de este trabajo, hecho por 33 expertos y que cubre 70 años, provienen de bases de datos personales, literatura científica y estadística y noticias recogidas de la prensa. Por el que afirman las conclusiones del estudio, la causa más probable de este aumento de los ataques de animales a las personas es claramente en el crecimiento de la población humana, que ha ido urbanizando la Tierra, rodeando los lugares donde vivían animales como por ejemplo lobos, osos y grandes felinos. Es, simplemente, una cuestión de probabilidad, puesto que los encuentros se han hecho cada vez más habituales.

Diferencias entre países
De hecho, un dato a tener en cuenta es que, si en los países pobres la mayoría de ataques tienen lugar cuando las personas cazan o trabajan en sus granjas, en los países ricos se producen durando actividades de ocio, como por ejemplo hacer excursiones o acampar. Otra es que, de todos los ataques registrados durante estos 70 años, el 32% han estado mortales.
La influencia del cambio climático
Por otro lado, pero, el cambio climático también puede estar agraviando este aumento de los ataques. Y tener en cuenta todas las variables es muy importante. El retroceso del hielo del Ártico, por ejemplo, está haciendo más probable que se produzcan encuentros entre osos polares y personas, y los problemas de los carnívoros para alimentarse en todo el mundo los están haciendo acercarse cada vez más a los asentamientos humanos.

Un hecho al que nos tendremos que acostumbrar
Que los animales se están acostumbrando a la proximidad a los humanos, y a menudo a la inversa también, es suficiente conocido, especialmente en casos de ciudades como Barcelona a pesar de que, dichosamente, los animales que corren por las calles más próximas al bosque no son carnívoros sino jabalíes. Esta situación, además, no parece que tenga que mejorar sino más bien al contrario, que irá en aumento. Muchas especies animales se están ‘urbanizando’ y adaptando en la vida con los humanos y esto requerirá que nosotros también nos adaptamos a su presencia para evitar que los problemas continúen creciendo o que, como en tiempos pasados, nos decidimos a empezar a exterminarlos.