El Libro Guinness de los Récords ha certificado que se ha batido el de los gemelos más prematuros del mundo. Según han informado, unos mellizos nacidos en el Canadá, que solo llevaban 22 semanas de gestación en el momento del parto, son los nuevos propietarios de este récord que es más bien un milagro. Al ponerse de parte, los médicos dijeron a la madre, Shakina Rajendram, que los bebés «no eran viables» y que tenían «un 0% de probabilidades de supervivencia».
Los intentaron salvar por muy poco
De hecho, los gemelos eran tan prematuros que, si hubieran nacido una hora antes de las 22 semanas de gestación, los médicos ni siquiera habrían intentado salvarlos. E incluso en este caso, naciendo 126 días antes de tiempos -superando el récord de 125 días establecido el 2018–, los profesionales del hospital no tenían ninguna esperanza de poder ayudarlos, tal como recuerda el padre, Kevin Nadarajah, que añade que pasó la noche rezando y «con la cara manando lágrimas».
De hecho, la mayoría de hospitales no intentan salvar los bebés que nacen entre las 24 y las 26 semanas. En cuanto al récord mundial del bebé más prematuro, es a las 21 semanas y un día. En el caso de Shakina Rajendram, era el segundo embarazo, y hacía pocos meses que había perdido el que habría sido su primer hijo.
Se puso de parte a 21 semanas y 6 días
En esta ocasión, la pareja fue al Hospital Mount Sinai de Toronto, que tiene una unidad de cuidados intensivos neonatales altamente especializada. Incluso allá, pero, no tenían muchas esperanzas. Durante el segundo día de parte –a 21 semanas y 6 días de embarazo–, informaron Rajendram que, si no llegaba a las 22 semanas, no intentarían salvarlos.
Es por eso que, a pesar de que sangraba mucho, la madre hizo el que pudo por «aguantar los bebés adentro» unas cuántas horas más. Finalmente, rompió aguas cuando habían pasado 15 minutos de la medianoche y, a las 22 semanas y dos horas, los pequeños Adiah y Adrial nacieron. Tenían, pero, muchos problemas médicos que tuvieron que ser tratados inmediatamente por los profesionales del hospital.
Por suerte, y a pesar de que a día de hoy continúan haciéndolos un seguimiento mucho de cerca, los dos hermanos evolucionan favorablemente.
