Un comunicado de prensa hecho público por la farmacéutica Eli Lilly afirma que la empresa ha desarrollado un nuevo medicamento contra el Alzheimer que consigue hacerlo avanzar hasta un 30% más despacio del que lo haría de manera normal. Así, el conocido como donanemab se convierte en el segundo fármaco en solo un año que consigue resultados prometedores en los ensayo en humanos, en un salto en la investigación contra esta enfermedad que, hace muy poco, parecía imposible.
Un anticuerpo para eliminar la proteína beta amiloide
El donanemab funciona del mismo modo que el lecanemab, el otro medicamento que ha demostrado que bote parar el avance de la enfermedad. Así pues, es un anticuerpo preparado para eliminar la proteína beta amiloide, que en el caso de los pacientes de Alzheimer se acumula formando placas al seso y entre las neuronas. De este modo, y si bien ninguno de los dos fármacos consigue parar la enfermedad, podríamos estar entrando en una era uno el Alzheimer empiece a acontecer una enfermedad crónica en vez de una contra la cual solo se pueden ofrecer tratamientos paliativos y apoyo.
Resultados muy buenos y un efecto secundario potencialmente mortal
A los ensayos clínicos participaron 1.734 personas que se encontraban en las primeras fases del desarrollo de la enfermedad. Se los administró el donanemab una vez en el mes hasta que se observó que las placas al seso desaparecían. De manera general, el adelanto del Alzheimer se redujo en un 29%, y en un 35% en los pacientes que se esperaba que respondieran mejor al tratamiento. Así, el donanemab los permitió continuar con más actividades de su vida normal, como por ejemplo hablar de acontecimientos presentes o conducir.
Sin embargo, la inflamación del seso fue un efecto secundario habitual, que afectó hasta una tercera parte de los participantes al ensayo. Si bien en la mayoría de los afectados esta inflamación fue leve y asintomática, detectada solo gracias a los escáneres cerebrales, en un 1,6% de los casos llegó a niveles peligrosos y, incluso, dos personas murieron como consecuencia directa.
La farmàcèutica buscará la aprobación del medicamento
Eli Lilly considera que, como pasa con muchos medicamentos efectivos contra enfermedades debilitantes y mortales, pueden haber riesgos asociado que pueden ser peligrosos o incluso poner en peligro la vida de los pacientes porque que, sin embargo, los resultados de estos ensayos son muy prometedores y que la compañía, durante los próximos meses, empezará los trámites para conseguir que el fármaco sea aprobado para ser empleado en los hospitales.
En cualquier caso, que dos medicamentos hayan conseguido retardar el adelanto del Alzheimer en tan poco tiempo parece que muestra que, después de décadas de fracasos, la medicina es en el camino correcto para continuar investigando en nuevas terapias. Sin embargo, también hay que remarcar que los fármacos solo funcionan en las primeras fases de la enfermedad y que, por lo tanto, diagnosticarla rápidamente es importantísimo por, si se tercia, poder empezar el tratamiento y cronificar-la en lo posible.
