Un equipo de investigadores de la Universidad de Cambridge, en Inglaterra, han creado un chef robótico que es capaz de aprender a preparar platos mirando videos de cocina. En el artículo donde lo presentan, publicado en la revista ‘IEEE Access’, sus inventores explican cómo lo programaron para ayudarlo con ocho recetas de ensaladas sencillas que, después de ver un video de un humano haciendo, pudo identificar y reproducir. No solo esto sino que, después de los primeros experimentos, el robot fue capaz de incorporar una novena receta nueva.
Los resultados muestran como los contenidos en video pueden ser una fuente muy importante de datos para la producción automática de alimentos y permitir la creación y despliegue de chefs robóticos más fáciles de desarrollar y también más baratos. Toda una idea de ciencia ficción que, como tantas otras, cada vez está más cerca de hacerse realidad.
Un concepto muy difícil de implementar
A pesar de que el concepto hace décadas que existe, hacer cocinar un robot es mucho más complicado del que parece. Hay muchas empresas que han desarrollado prototipos pero cabe de ellos no ha llegado al mercado, y una de las razones es que tienen algunas carencias importantes respecto a los humanos en cuanto a la habilidad pero también a la capacidad de aprender. Las personas pueden integrar recetas nuevas mediante la observación, ya sea en directo o en video, un método mucho más rápido que no programar un robot para que aprenda a hacer comidas diferentes.
Identificando ingredientes, enseres y acciones
Es por eso que los investigadores miraron de conseguir crear un robot capaz de aprender a cocinar del mismo modo que un humano, identificando los ingredientes y la manera como se combinan al plato. Así, crearon ocho recetas sencillas y se grabaron haciéndolas. Después, usaron una red neural de acceso público para entrenar el robot, después de programarla para identificar una serie de objetos, entre los cuales los ingredientes.
El robot analizó cada fotograma de los videos, identificando los enseres e ingredientes necesarios además de los brazos, las manos y la cara del human que cocinaban. Tanto las recetas como los videos fueron convertidos en vectores y el robot llevó a cabo operaciones matemáticas para determinar el parecido entre el que veía y los vectores. Así, pudo saber qué receta se llevaba a cabo en cada caso y entender que, si el humano tenía una zanahoria en una mano y un cuchillo a la otra, la verdura estaba a punto de ser cortada.
El chef vio 16 videos e identificó la receta el 93% de las veces y las acciones de los humanos el 83% de las veces. También aprendió a distinguir variaciones a las recetas, como por ejemplo poner el doble de algún ingrediente, y también qué diferencias eran a causa de errores humanos. Con todo esto, pudo ver un video de una nueva receta, añadirla a su base de datos y prepararla.
El cocinero del futuro, algo más cerca
A pesar de que las recetas empleadas en esta prueba eran sencillas, las capacidades del robot se han demostrado ampliamente y son prometedoras, y a pesar de que los videos no son como los que se pueden encontrar en YouTube, muy rápidos y con grandes saltos, quienes sabe si en el futuro también los podrá llegar a usar para aprender recetas. Con un robot así, cualquier persona podría ver un video con una receta que querría probar y pedir a su chef personal que le preparara.
