Los nuevos modelos que han desarrollado los miembros del Australian National University (ANU) y el Centro de Excelencia ARCO para Extremos Climáticos señalan que el país oceánico podría quedar expuesto a ‘megasequías’ que durarían más de 20 años. Este equipo de investigadores también ha señalado que, en comparación
Los investigadores utilizaron varios modelos climáticos para analizar las sequías en Australia, su duración, la intensidad y los efectos del cambio climático. Estos modelos han simulado las sequías del último milenio para ver su evolución y como pueden cambiar en un futuro próximo. Este análisis puede predecir la duración de las sequías australianas y que secas podrían llegar a ser.

Georgy Falster, coautor principal del estudio y miembro de la Escuela de Investigación de Ciencias de la Tierra de la ANU, señala que «uno de los hallazgos contradictorios de nuestro trabajo es que es posible que las sequías en Australia sean mucho más largas que cualquiera de las sequías que hemos experimentado en los últimos tiempos. Las sequías que continúan durante 20 años o más son una cosa que tendríamos que esperar que suceda».
El gran peligro
Falster señala que si Australia sufriera ahora una ‘megasequía’ el cambio climático amplificaría sus consecuencias, puesto que el clima más cálido actual potenciaría la ‘megasequía’: «La combinación del cambio climático con las ‘megasequías’ naturales que podrían durar 20 años significa que en el futuro Australia podría sufrir sequías peores que cualquier otra experiencia histórica reciente«. El investigador ha querido advertir la población australiana de la «posibilidad que una de estas ‘megasequías’ de varias décadas pueda ocurrir en el futuro próximo.»