Un equipo de investigadores de la Universidad Queen Mary de Edimburgo, en Escocia, han anunciado que han conseguido crear una alternativa al aceite de palma que es a la vez más sana y más respetuosa con el medio ambiente. Según informa la cadena británica BBC, sus inventores han explicado que el nuevo producto, que han bautizado PALM-ALTO, es el «Santo Grial» para la salud y para el medio ambiente, puesto que tiene ventajas enormes respeto el aceite de palma tradicional, que hace años que está rodeado de polémica.

Un producto omnipresente y un negocio gigantesco
Proveniente del fruto de la palma de aceite, este producto es presente a prácticamente la mitad de los productos de alimentación y cosmética que podemos encontrar a los estantes de los supermercados. A día de hoy es el aceite vegetal más produit del mundo, suponiendo un 40% del total, y un negocio de unos 60.000 millones de euros anuales. Esto, está claro, es porque su demanda es enorme, y su cultivo ha crecido sin cesar en los alrededores del ecuador, donde el clima es propicio, y especialmente en Indonesia y Malasia, que concentran el 85% de la producción y donde se han destruido extensiones enormes de bosque para hacer lugar, poniendo en riesgo orangutanes, rinocerontes, elefantes y tigres, entre otros.

Mejor para el medio ambiente y también para la salud
El aceite de palma, pues, se ha convertido en uno peligro medioambiental de primer orden. En este sentido, y según sus creadores, la alternativa que supone PALM-ALTO es un 70% mejor para el medio ambiente en cifras de emisiones de gases de efecto invernadero y continúa teniendo un origen 100% vegetal. Además Catriona Liddle, una de las líderes del equipo, afirmó en declaraciones a la BBC que no solo puede «sustituir» el aceite de palma sino que han conseguido «el mismo resultado final»: «tiene el mismo gusto y tiene la misma textura».
Las pruebas hechas con paneles sensoriales, de hecho, apuntan que son indistinguibles, a pesar de no tener palma, coco, azúcar, endolcidors, conservantes ni colorantes. Los ingredientes, explican sus creadores, son principalmente un residuo de la industria del lino, fibra natural y aceite de colza. Esto hace que, además, tenga un 80% menos de grasas saturadas y un 30% menos de calorías y por tanto, sea más saludable que el aceite de palma. Los investigadores afimen que ya están preparando conversaciones con socios industriales para empezar a producir PALM-ALTO a gran escala.