El aumento de la temperatura global y sus efectos son bien visibles en todo el mundo. Ahora, un grupo de investigadores ha podido comprobar que el calentamiento global ha desenterrado del hielo de Beartooth Plateau, en Yellowstone, un bosque de pinos blancos (Pinus albicaulis) que data de hace 6.000 años. Este bosque quedó sepultado bajo una gran capa de hielo perenne del Gran Ecosistema de Yellowstone. El estudio de los científicos muestra que estos árboles crecieron aprovechando un período de temperaturas altas, pero cuando el clima se volvió gélido de forma drástica quedaron atrapados hasta ahora, cuando el aumento de las temperaturas está derritiendo el hielo global. Los científicos señalan que el crecimiento de los árboles se produjo cuando la temperatura media de la estación cálida era de 6,2%, pero un cambio de tiempo provocado por los cambios en la insolación de verano y el vulcanismo del hemisferio norte -según las simulaciones climáticas (basadas en los anillos de los árboles) de los investigadores- hizo que los árboles se sumergieran en el hielo.
Según los científicos, este hallazgo muestra cuán capaces son los ecosistemas de adaptarse y responder a los cambios climáticos a largo plazo y destacan el valor de la zona de Beatooth Plateau, ya que además de los árboles también han emergido varias herramientas de madera que datan de hace 10.000 años, un hecho que lleva a los científicos a pensar que varias comunidades prehistóricas habitaron la zona cuando las condiciones eran favorables para el desarrollo de la vida.
Beartooth Plateau, una zona de grandes cambios
Hoy en día, esta zona de Yellowstone es un terreno poco favorable para la vida: es árido y está sometido a varias ráfagas intensas de viento. Hace 6.000 años, sin embargo, este panorama no era el mismo, era un terreno con temperaturas cálidas y templadas que permitían que la vida prosperara. Las temperaturas, de forma repentina, descendieron debido a la disminución de la insolación solar y las erupciones volcánicas del hemisferio norte. Estas erupciones hicieron que el cielo se llenara de cenizas y esto causó que la radiación solar se redujera drásticamente, un hecho que provocó este enfriamiento repentino de la región, transformando una zona en la que había bosques, plantas, en definitiva un ecosistema verde, en una zona totalmente dominada por el hielo.