El deshielo es una de las consecuencias más destacadas del cambio climático y el calentamiento global. El aumento constante de las temperaturas está derritiendo, poco a poco, los glaciares de todo el mundo, como es el caso de Alaska, donde los glaciares del sureste están retrocediendo a niveles alarmantes; además, el agua generada por este deshielo está alterando el paisaje, haciendo que crezcan lagos o que aparezcan nuevas islas. En el glaciar Alsek, en la llanura costera del sureste de Alaska, este fenómeno está haciendo que este glaciar haya pasado de rodear la montaña Prow Knob a generar una nueva isla en esta parte del mundo. El deshielo del glaciar Alsek ha hecho que se alimenten las aguas del lago homónimo y que esta pequeña montaña se haya visto rodeada por las aguas del lago Alsek. En imágenes por satélite publicadas por el NASA Earth Observatory se ha registrado cómo el glaciar ha ido perdiendo masa que, en cambio, ha ido ganando el lago entre 1984 y 2025.
Los investigadores señalan que desde 1984 la pérdida de hielo ha hecho que el lago Alsek haya pasado de medir 45 a 75 kilómetros cuadrados, un aumento preocupante que ha cambiado el paisaje de Alaska.

Cómo ha cambiado el paisaje en Alaska
Los miembros del NASA Earth Observatory señalan que en 1984, tal como se recoge en las observaciones hechas por Mauri Pelto, glaciólogo del Nichols College, el glaciar se encontraba a unos 5 kilómetros al oeste de Prow Knob. No fue hasta 199 que el retroceso de los glaciares de Alsek y Grand Plateau causó el primer gran incremento del lago Alsek y desde entonces el retroceso no ha hecho más que aumentar y en 2025 el retroceso fue lo suficientemente grande como para separar el hielo de Prow Knob y acabar transformando la montaña en una isla entre el 13 de julio y el 6 de agosto.
Los investigadores destacan que desde 1984 los dos brazos del glaciar Alsek han acabado retrocediendo más de 5 kilómetros, una tendencia que cada vez irá a más, ya que desde que el glaciar no está conectado con la montaña, su hielo es más inestable y, por tanto, más propenso a sufrir desprendimientos.