Unas 800.000 personas murieron debido a los fenómenos climáticos extremos en las últimas tres décadas (entre 1992 y 2022). Esta es la conclusión que extrae el último informe del Índice de Riesgo Climático (IRC). Los expertos señalan que en estos 30 años la frecuencia e intensidad de las tormentas, inundaciones, olas de calor y sequías aumentaron, y provocaron consecuencias extremadamente graves para los humanos y las economías de los países. El informe detalla que más de 765.000 personas perdieron la vida y se causaron pérdidas económicas valoradas en más de 4,2 billones de dólares debido a estos fenómenos.
España, uno de los países más afectados
El IRC detalla que países como Dominica, China, Honduras, Myanmar, Italia o India son algunos de los más afectados en los últimos treinta años (1992-2022). Junto con todos estos países también está España, país del cual relatan que «las olas de calor de 2003 y 2022 cobraron un alto número de víctimas mortales y causaron extensos daños a consecuencia de las sequías e incendios forestales.» Las últimas sequías (como la que ha sufrido Cataluña) no son el único fenómeno extremo que causó estragos en España, ya que los expertos señalan que «la sequía de 1999 y las inundaciones de 2019 también causaron grandes destrozos».
De hecho, España también es uno de los grandes afectados por estos fenómenos extremos en el último año analizado por los expertos -2022-, ya que el IRC señala que la sequía de 2022 fue el gran fenómeno climático extremo que causó estragos. «Entre mediados de junio y mediados de julio de 2022, un calor extremo e incendios forestales provocaron temperaturas de hasta 43,2 °C, que causaron más de 11.000 muertes y afectaron a 3.500 personas», señala el informe.

¿Qué es el Índice de Riesgo Climático?
El Índice de Riesgo Climático (IRC) -en inglés Climate Risk Index (CRI)- es un indicador que analiza cuál es el impacto que sufren los países debido a los fenómenos meteorológicos extremos y evalúa las consecuencias de los riesgos. El IRC clasifica a los países según cómo hayan afectado estos fenómenos climáticos extremos de acuerdo con los impactos económicos y los efectos personales (personas heridas, muertas o que han perdido su hogar). Los creadores del informe detallan que el objetivo es «contextualizar los debates y los procesos sobre políticas climáticas internacionales y analizar los riesgos climáticos que enfrentan los países.»
Para hacer el análisis del impacto utilizan los datos que se recogen de la EM-DAT (la base de datos internacional de desastres), el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, y con ellos pueden examinar los impactos de los fenómenos climáticos extremos.