En los últimos tiempos, los medicamentos contra la diabetes tipo 2 y la obesidad como pueden ser el Ozempic, el Wegovy o el Rybelsus se han popularizado y se han extendido, incluso se ha vinculado su uso en el deporte de élite como la NBA. Aunque su popularización su consumo ha estado vinculado con la aparición de una enfermedad ocular infrecuente, pero grave, como es la neuropatía óptica isquémica anterior no arterítica (NOIANA). Ahora, en un comunicado de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) se alerta del riesgo del consumo de estos medicamentos, ya que podría elevar el riesgo de desarrollar esta enfermedad, una enfermedad que en los casos más graves puede acabar provocando una pérdida de visión súbita y sin dolor.
El Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia (PRAC) de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) ha sido quien ha examinado las evidencias, los estudios y las notificaciones clínicas que vinculan el uso de estos medicamentos con esta enfermedad e indica que “los datos disponibles apoyan una asociación causal entre el tratamiento con semaglutida y la aparición de NOIANA”. A pesar de la advertencia de las autoridades sanitarias, se detalla que la frecuencia de la NOIANA es muy rara y ‘solo’ afecta a una persona de cada 10,000 que utilizan estos fármacos aunque matizan que el impacto visual es un factor grave de riesgo y se ha tenido que incluir en la ficha técnica de estos medicamentos. Los expertos de los organismos sanitarios señalan que no se ha podido establecer un intervalo de tiempo específico entre el inicio del tratamiento y la aparición de la neuropatía, un hecho que complica mucho la detección precoz de esta enfermedad y, por lo tanto, una atención sanitaria correcta y detallada.
Si se detecta una pérdida de visión, deben seguirse las recomendaciones sanitarias
Uno de los aspectos que más se destaca desde los organismos sanitarios mundiales es que «si experimenta pérdida súbita o un empeoramiento rápido de la visión, consulte inmediatamente con su médico» y siga las recomendaciones de los médicos, a quienes instan a vigilar la evolución de los pacientes que han experimentado esta pérdida visual. Además, también se señala la importancia de no dejar pasar los síntomas, ya que el diagnóstico precoz puede ser decisivo para la salud del paciente. Si se detectan síntomas compatibles con la NOIANA, se debe interrumpir de forma drástica el tratamiento y enviar al paciente a un especialista oftalmológico para poder tratarlo.

Es importante destacar, sin embargo, que el Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP, en sus siglas en inglés) de la EMA aún debe tomar una decisión definitiva y que, en caso de ser favorable, acabaría causando una actualización de los prospectos y de las fichas técnicas de estos medicamentos para advertir de estos nuevos efectos adversos para la salud.