La amenaza del cambio climático y el calentamiento global está provocando que las especies de todo el mundo intenten idear formas de evitar las consecuencias de estos fenómenos. Un nuevo estudio publicado en el portal científico Springer Nature Link señala que los osos polares están comenzando a adaptarse al nuevo escenario que establece el cambio climático y están evolucionando para contrarrestar el cambio climático. Concretamente, el estudio destaca que los osos polares de Groenlandia experimentan cambios en sus genes que permiten a estos mamíferos adaptarse a un entorno al cual, por defecto, la especie no estaría adaptada.
A través de datos recopilados de la Universidad de Washington y los registros climáticos recogidos por el Instituto Meteorológico de Dinamarca, los investigadores pudieron descubrir que hay un patrón entre el incremento de las temperaturas y las variaciones genéticas de los osos polares. Concretamente, los investigadores encontraron que el estrés climático derivado del cambio climático provoca una movilización masiva de los transposones -segmentos móviles del ADN de los osos polares que representan casi el 40% de su genoma-, una movilización que reconfigura el metabolismo de estos animales, un hecho que implica que los osos polares se estarían adaptando a dietas diferentes de las que están acostumbrados, ya que estas se ven amenazadas por el impacto del cambio climático.
Los estudios prevén una pérdida masiva de la población de osos polares
Diversos estudios previos han señalado, independientemente de esta variación genética en los osos polares, que el futuro de los osos polares está seriamente amenazado debido al impacto del cambio climático y el calentamiento global. La previsión para 2050 es que el impacto de estos fenómenos climáticos cause la desaparición de cerca de dos tercios de la población global de osos polares, un hecho que asocian con el deshielo que destruye su hábitat y también la disponibilidad de zonas de caza para atrapar focas.
