Los murciélagos han estado animales sobre los cuales ha cercado todo tipo de fantasía e historias mitológicas, una de las más claras son los vampiros o el mismo ‘conde Dràcula’, humanos convertidos que necesitaban la sangre humana para sobrevivir y se convertían en murciélagos. El animal, pero, no tiene nada que ver con estas historias fantásticas y, de hecho, investigadores de la Universidad de Tel Aviv han descubierto que los murciélagos tienen habilidades cognitivas complejas que hasta ahora solo se habían atribuido a los seres humanos.
Este estudio, publicado en la revista Current Biology usó rastreadores GPS en murciélagos y documentó las rutas de vuelo y los árboles que visitaban. Estos datos las analizaron y pudieron descubrir que los murciélagos hacían mapas mentales. Lee Harten, doctor de la Escuela de Neurociencia de la Universidad explica que «después de un día de cautiverio, los murciélagos volvían a los árboles visitados la noche anterior, pero, cuando había pasado una semana entera, los murciélagos más viejos, basándose en la experiencia previa, evitaban los árboles que habían dejado de dar frutos al intervalo.»
Esto quiere decir que los murciélagos fueron capaces «de estimar cuánto de tiempos había pasado desde su última visita a cada árbol y sabían qué árboles dieron frutos durante un corto periodo de tiempo y ya no merecía la pena visitarlos. Los murciélagos jóvenes e inexpertos no pudieron hacer esto, cosa que indica que se trata de una habilidad adquirida que hay que aprender».

El coautor del estudio, Chen Xing, explica que es posible que los murciélagos tengan estrategias y que planifiquen el futuro, puesto que «vuelen directamente a un árbol específico que conocen, a veces a 20 o 30 minutos de distancia. Al tener hambre, vuelan más deprisa cuando este árbol está más lejos, lo que sugiere que planeen hacia donde se dirigen. Además, concentrados en su objetivo elegido, pasarán por otros árboles, incluso por buenas fuentes visitadas ayer, cosa que indica una capacidad para la gratificación retardada. Eligen árboles con frutos ricos en azúcar, mientras que los murciélagos que se van después buscan proteínas“.
Comportamientos ‘humanos’
El profesor de la Facultad de Zoología, Yossi Yovel, explica que a pesar de «durante muchos años, las capacidades cognitivas para recordar experiencias personales (memoria episódica) y planificar el futuro se consideraron exclusivas de los humanos», una creencia que cambia, puesto que cada vez más estudios están sugiriendo que determinados animales también tienen esta capacidad. Todo y estos descubrimientos, Yovel señala que «casi todos estos estudios se llevaron a cabo en condiciones de laboratorio, puesto que los estudios de campo sobre estas cuestiones son difíciles de realizar».