En Gloucester, Inglaterra, el suelo bajo un centro comercial abandonado ha sacado a la luz más de 300 cadáveres -que datarían de la época medieval- que habían estado en esta localidad inglesa. El hallazgo ha sido totalmente accidental, ya que se ha producido durante el transcurso de las excavaciones que se están realizando para construir un nuevo campus para la Universidad de Gloucestershire. El descubrimiento de estos cadáveres puede aportar nueva información sobre la importancia de la villa medieval de Gloucester, la cual era una parte importante para el comercio y la administración del reino. Hasta el momento se han recuperado 317 cuerpos sin vida bajo el antiguo centro comercial Debenhams de Gloucester.
La excavación comenzó en el año 2024 en el solar donde, anteriormente, se había edificado el centro comercial y está a cargo de los arqueólogos de Cotswold Archaeology, dirigidos por el arqueólogo municipal de Gloucester, Andrew Armstrong. Su equipo fue el encargado de realizar los trabajos previos y el estudio para poder construir el nuevo campus universitario.
Las primeras investigaciones de los investigadores indican que bajo el centro comercial, siglos atrás, se había producido una compleja serie de enterramientos, ya que había varios cuerpos inhumados en ataúdes de madera mientras que otros se habían enterrado directamente en el suelo como si fuera una fosa común. Los investigadores pudieron identificar que los diversos cadáveres estaban distribuidos a través de varios niveles, un hecho por el cual señalan que esta zona habría servido de cementerio entre los siglos XI y XVIII. Entre los cuerpos encontrados hay individuos que corresponderían a personas adultas y otros a infantes, un patrón típico de los cementerios medievales urbanos, ya que durante esta época la tasa de mortalidad infantil era elevada y la cantidad de enfrentamientos armados entre naciones y plagas y enfermedades eran habituales.
Gloucester, una importante localidad de la época medieval inglesa
Gloucester es una ciudad inglesa que se encuentra muy cerca de grandes urbes del Reino Unido. Su situación geográfica ubicada al lado del río Seven -que acaba desembocando en el Canal de Bristol- se encuentra a 100 kilómetros de Cardiff, 86 de Birmingham, 168 de Londres y a 63 de la misma Bristol. Durante la época medieval esta ciudad se convirtió en una ubicación clave para el comercio y la administración inglesa y también se convirtió en una ciudad con amplia presencia religiosa gracias a las diversas iglesias y monasterios que se edificaron. Uno de estos edificios eclesiásticos de gran importancia fue la iglesia medieval de San Nicolás Owen (un mártir jesuita) que se habría construido en el siglo XII y fue derruida para reforzar las defensas de la ciudad durante la guerra civil inglesa de 1643.
