Un nuevo estudio alerta que el ciclo de lluvias del Amazonas ha experimentado un cambio totalmente drástico en los últimos 40 años, ya que gracias a la observación de los anillos de los árboles de la región se ha podido detectar que las temporadas de lluvia son cada vez más lluviosas mientras que las temporadas secas también son más secas. Es decir, se han vuelto más extremas.
El equipo de investigación internacional -fruto de la colaboración entre las Universidades de Leeds y Leicester y el Instituto Nacional de Investigación del Amazonas ha podido reconstruir los cambios estacionales gracias a las señales de isótopos de oxígeno en los anillos de dos especies de árboles amazónicos y muestran que las precipitaciones en la temporada de lluvias han aumentado entre un 15% y un 22%, y las de la temporada seca han disminuido entre un 5,8% y un 13,5% desde 1980. Tal como recoge el portal Eureka Alert, uno de los autores del estudio, el doctor Bruno Cintra, señala la importancia de los hallazgos y destaca que “el Amazonas es un componente clave del sistema climático de la Tierra. Comprender cómo está cambiando su ciclo hidrológico es esencial para predecir escenarios climáticos futuros y desarrollar estrategias de conservación eficaces. La próxima COP30 en Belém, Brasil, representa una oportunidad crucial para que los líderes mundiales tomen medidas decisivas”.
Los coautores Roel Brienen y Emanuel Gloor, de la Universidad de Leeds, aseguran que “nuestra investigación demuestra que el ciclo hidrológico del Amazonas se está volviendo más extremo.

Los cambios globales, con un impacto local
Una de las hipótesis con las que trabajan los investigadores es que estos ciclos estacionales del Amazonas sufren este ‘extremismo’ debido a los cambios en las temperaturas de los océanos Atlántico y Pacífico circundantes y señalan que hay fuertes indicios de que el cambio climático antropogénico influye en este hecho.