El conjunto de abrigos de la ermita de la Piedad de Ulldecona (Montsià) ha sobrevivido al paso de la borrasca Alice y, aparentemente, lo ha hecho sin sufrir daños ni afectaciones importantes en el conjunto de arte rupestre levantino declarado Patrimonio de la Humanidad. A pesar de este primer vistazo, el Ayuntamiento de Ulldecona ha anunciado que llevará a cabo un análisis en profundidad para poder esclarecer los posibles daños que el agua haya causado en las pinturas, como los sufridos en el abrigo IV, donde los aguaceros en la sierra de Godall causaron desprendimientos de rocas e infiltraciones de agua en las paredes.
La parte positiva la representa el abrigo I, que según ha explicado Agustí Vericat, técnico de patrimonio del Ayuntamiento de Ulldecona, a la ACN, ha resistido el temporal sin ninguna afectación evidente. «Han resistido bien. Evidentemente, no es el primer temporal de estas características que padecen y ven pasar. Pero sí que es verdad que ha caído mucha agua y, por tanto, en la misma roca hay infiltraciones de agua que pueden afectar posteriormente los grabados y las pinturas rupestres», añade la alcaldesa de Ulldecona, Núria Ventura.
Un análisis a fondo
Según ha explicado la alcaldesa de la población, el consistorio de Ulldecona ha encargado un análisis y trabajo de evaluación «más a fondo» para poder «garantizar la preservación»; análisis del cual se encargarán los responsables técnicos del conjunto de abrigos de la ermita de la Piedad de Ulldecona. Además, Ventura ha señalado que desde hace años la administración realiza programas de «conservación preventiva» que permite disponer de un archivo de fotografías periódicas del estado del conjunto. Según Vericat, estas medidas iniciadas por el ayuntamiento permiten avanzar en «futuras acciones» para preservar esta joya patrimonial de Cataluña.

Vericat señala que, además, las zonas más expuestas a este tipo de condiciones climáticas hacen que estos conjuntos patrimoniales sean «enfermos crónicos» y que, por tanto, el objetivo debe ser «alargar su vida útil». «Llevamos seis o siete años en los cuales tenemos una DANA de las más fuertes cada uno o dos años y aquí en la ermita sí que vemos afectaciones cada año. Sobre todo, en el tema de erosión del camino, lo que dificulta el acceso de las personas y lo tenemos que ir solucionando», lamenta el técnico de patrimonio del Ayuntamiento de Ulldecona.
