Las misiones espaciales a Marte están centrando todos los esfuerzos de la carrera espacial moderna. Uno de los avances que busca la NASA es mejorar la efectividad de sus róvers en Marte. Uno de estos avances que persigue la agencia espacial estadounidense es la implementación de unos neumáticos que mejoren las prestaciones de los róvers en las misiones marcianas. Estas nuevas ruedas son neumáticos de resorte de aleación con memoria de forma (SMA), es decir, son metales que tienen la capacidad de volver a su forma original después de ser doblados, estirados, calentados y enfriados, una característica que puede ser fundamental en un terreno rocoso e irregular como es Marte. Estos neumáticos se han creado en el Centro de Investigación Glenn de la NASA gracias a la colaboración de la agencia y la reconocida marca de neumáticos para vehículos Goodyear.
Una gran resistencia
Una de las claves de estas nuevas ruedas es que los ingenieros centraron la mayor parte de sus esfuerzos en que los neumáticos de los róvers fueran más resistentes y adaptables a los entornos que deben explorar. La investigación los llevó a una aleación de níquel y titanio. El resultado de esta aleación es que el metal puede adaptarse a la deformación de manera eficaz a pesar de estar expuesto a condiciones de estrés extremo. Esta capacidad de los nuevos neumáticos de sufrir una deformación y volver a su forma original supone una gran revolución respecto a los neumáticos hechos con metal convencional que actualmente utilizan los róvers.
Los científicos de la NASA ya han llevado a cabo pruebas en una instalación cerrada donde se simularon las condiciones de la superficie del terreno rojo y pudieron ver cómo estos nuevos neumáticos cumplieron todas las expectativas y permitieron recoger información sobre su estabilidad, la maniobrabilidad y las capacidades de travesía de rocas.
