Todos los caminos llevan, y se pueden ver digitalmente, a Roma. Un equipo internacional de científicos ha creado un nuevo mapa completo y digital que, además, ha aumentado el tamaño de la red de transporte del imperio romano. Este proyecto, que ha sido bautizado como Itiner-e, y ha nacido gracias a la unión de mapas topográficos, imágenes de satélite y siglos de registros históricos, y los investigadores destacan que este proyecto es el primer conjunto de datos abiertos de su tipo.
Los científicos señalan que, además, este nuevo mapa Itiner-e supone un avance, ya que según los datos, la longitud total de la red de carreteras en este momento es de aproximadamente unos 299.171 kilómetros, una cifra mucho más alta (aproximadamente un 60% más) que las estimaciones anteriores hechas por el Atlas de Barrington del mundo griego y romano.
Uno de los hechos que destacan los científicos de este proyecto es que este nuevo mapa interactivo solo puede situar precisamente -a menos de 50 metros de montañas y 200 metros de tierra plana- el 2,8% de la red de infraestructuras romanas. Los miembros del proyecto destacan que, generalmente, los ojos de los humanos han estado más pendientes de otros tipos de infraestructuras romanas como los grandes coliseos, anfiteatros, y templos religiosos, pero a la vez tienen una gran importancia y un mejor conocimiento de la red de carreteras romanas puede informar potencialmente nuestra comprensión de muchos eventos de gran impacto en la historia europea.
Las carreteras de la antigua Roma
Uno de los ejemplos más claros de la vigencia de estas carreteras hoy en día es la Via Augusta. Esta colosal vía romana unió la península de Hispania con los territorios romanos en la Galia y la península Itálica y se convirtió en la calzada más larga y el eje principal de la red viaria de la Hispania romana, ya que disponía de una longitud aproximada de 1.500 km y unía Narbona con Cádiz pasando por las grandes ciudades romanas de Hispania como Gades (Cádiz), Hispalis (Sevilla), Corduba (Córdoba), Carthago Nova (Cartagena), Valentia (Valencia), Tarraco (Tarragona) o Gerunda (Girona), aunque otras grandes urbes romanas como Barcino o Baetulo, las actuales Barcelona (donde por ejemplo se descubrió un tramo de la Via Augusta dentro del Mercado de Sant Antoni) y Badalona se conectaban a esta vía romana a través de ramales secundarios.
